Hamburguesas, nachos con guacamole y mucha cerveza, este es el menú necesario para una barbacoa y esta no iba a ser menos. Aqui todas las casas disponen de una barbacoa y es habitual comer en ella. Pero esto no era un día normal, al llegar nos encontramos con gente de todos los lugares: brasileños, americanos, coreanos, chinos, chilenos... Al principio la fiesta estaba un tanto calmada, pero a medida que la cerveza iba haciendo afecto se iba animando. Esto se fomentó aún más cuando sacaron la manguera con el embudo y empezaron a llenarlo de cerveza, todo un espectáculo digno de ver.
Pero no todo era alcohol y comida, tambien tuve mi momento de gloria patinando a lo Seth Cohen. Habia un monopatín de uno de los de la fiesta, así que lo cogí y empecé a probar. No es tan difícil como yo pensaba, pero tampoco fue tan excitante como para volverlo a repetir.
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